27/12/2012 - 18:30
Estoy estudiando estructuras en casa, y he llegado a un punto en que no entiendo muy bien como va todo el tema, es bastante confuso...
En fin, está "cómo conocí a vuestra madre" en la televisión y he quedado con una amiga que también hace arquitectura para cenar, si ella puede. Tengo que darle caña a esto de las estructuras.
Mi novio esta pasando un poco de mi. Le escribo y me responde a las 2 horas, y cuando lo hace son respuestas cansadas, banales, como obligadas. Eso me pone un poco paranoica, aunque no se muy bien como comportarme. No quiero ser una de esas novias paranoicas, como en las series como Sexo en Nueva York o la propia Cómo conocí a vuestra madre. Me daría mucha rabia ser tan...paranoica!
Pero sí que me preocupa cómo se está comportando. Intento hacer lo mismo que él, no contestarle o no hablarle en todo el día, pero me pasan 2 cosas: no soy capaz de no hablarle en todo el día, y por otro lado pienso que si no le hablo, aunque suene infantil y estúpido, pensará lo mismo que estoy pensando yo. Pero supongo que él es mucho más adulto que yo en estas cosas, y no es tan dependiente como lo soy yo.
Otra vez ha pasado. Le escribí a las 5 de la tarde, lo ha leído y aun no me ha contestado. Es horrible, odio eso. A él le molesta que no le coja el teléfono a veces y que mi boca no es demasiado bonita. Pues bien, estoy solucionando el problema de mi boca (no solo por él obviamente, yo no me veía bien), y le hablo un poco todos los días pero intentando no agobiar porque sé que está con su familia y sus amigos y conmigo está el resto del año, pero me molesta muchísimo que no me conteste, porque la única sensación que me da es que ya no le importo, únicamente eso.
Se que todo lo que escribo aquí es estúpido e infantil, pero es mi forma de desahogarme y así dejar de pensar un poco en ello. Además, nadie lee este blog.
Otro tema es mi prima, una persona egoista y a la que se la protege porque dicen que es una persona frágil. Eso son idioteces pienso yo. Porque ella no saque las notas que saco yo ni esté sacando la carrera que yo hago no quiere decir que haya que "protegerla", no le encuentro sentido. Además, cuando volvemos a casa después de todo el cuatrimestre habla a la familia e incluso a mí como si fuéramos idiotas, insultando como si fuera de broma, pero realmente no se entiende así. Yo no lo hago ni nadie lo hace ni se le responde mal, no vaya a ser que se sienta mal y haga cosas que no debe hacer. En la cena de Nochebuena no pude más y le di un capón en la cabeza, suave claro, y como no podía ser de otra manera, ella, que había estado toda la noche "insultando" de broma, me devolvió el porrazo. Ella puede y yo no? de qué va esto? Que alguien me lo explique.
He intentado hablar con mi novio sobre esto, de hecho ha sido el último mensaje que le he enviado y que como ya he dicho no me ha contestado. Supongo que no tiene ganas de escuchar mis problemas. Me siento como si no tuviera nadie a quien acudir. Incluso se lo he contado a mi hermana y en vez de escucharme miraba el movil, porque hay otras personas más importantes que yo. Estaba hablando con otra persona, y yo hablaba con ella, pero claro, no importa. Yo soy la hermana gandula que cuando llega a casa no hace nada, y ella lo sufre todo. Yo soy la única que habla con mi padre y es ella la que sufre? venga ya!
Y lo más triste es que ahora estoy aquí, sola, escribiendo un blog como si fuera un diario, sin quedar con nadie ni contarle mis problemas. Esa soy yo. No entiendo como mi novio, una persona activa y social, sale conmigo. Quizás el problema sea yo. No es la primera vez que pasa.
en fin, voy a volver a, no hacer nada.
jueves, 27 de diciembre de 2012
martes, 25 de diciembre de 2012
25/12/2012 - 22:00
Es Navidad ya, 25 de Diciembre. Estoy en el sofá de casa, con mi madre al lado leyendo unas cosas de acupuntura. El sábado se va a Valencia al curso otra vez y me estoy pensando irme con ella para conducir y también para estudiar el tiempo que ella esté en el curso. Es durante todo el día, así que si me voy será para volver sobre las 9 de la noche. No se lo que haré.
Ayer hablé con mi novio, como vivimos a casi 3000 kilómetros de distancia no nos vemos en Navidad, así que nuestra única forma de comunicarnos es vía teléfono. Ayer hablamos sobre las 3 de la madrugada, cuando acabó toda la cena. Yo estaba durmiendo y mi madre cogió el teléfono y contestó, estuvo un rato hablando con él y luego me lo pasó. Hablamos de cosas tontas, lo de siempre. Preguntas normales sobre cosas normales. Tengo ganas de verle la verdad, aunque aún puedo controlar las ganas. De todas formas, por la noche cuando estoy a punto de dormirme, pienso en él, en nuestra relación y me pongo a llorar. Es tonto porque todo va bien, no hay ningún problema de convivencia y cuando estamos juntos, en fin, todo va bien. Pero cuando le escribo estos días no me contesta, y sí que lee lo que escribo. Así que me enfado, en cierto modo. Porque yo sí contesto a lo que me escribe. No se el ritmo que lleva estos días, aunque seguro que es mucho más movido que el mío. Aún así sufro, por algo tan simple como pensar que yo estoy más pendiente de él que él de mí.
Sin embargo, por lo que le conozco y lo que hemos hablado, él es así. No está pendiente de muchas cosas, y no lo hace aposta, él es así. Es algo que no me gusta mucho de él, pero me sienta bien que sea así, porque así crezco un poco más cada día, porque tengo que aprender que no solo existe esta relación en mi vida ni es mi única meta, sino que existen muchas otras, como ser una buena arquitecto, acabar bien la carrera y trabajar todo lo que pueda en ello, salir con mis amigos, relacionarme más con la gente de la universidad, porque este cuatrimestre he estado bastante más aislada, sobretodo a raíz de lo que pasó con mi antigua compañera de piso, algo que al final no salió bien y fue un palo bastante grande. En parte por mi culpa.
En fin, son cosas que se aprenden poco a poco y a base de palos. A estas alturas del año, una reflexiona sobre todo lo que ha pasado durante él y me doy cuenta de que soy una persona muy distinta ahora, un año después, y de que la gente que está a mi alrededor ha cambiado, me refiero a que son personas distintas, no son las mismas con las que empecé. Son más adultas, tanto en edad como en mentalidad.
Mi prima dice que soy una vieja y aburrida. Es posible que sea así, pero lo que yo veo es que tengo otras prioridades, otras necesidades, otras formas de relacionarme con la gente; prefiero una buena cena o un café con alguien con quien quiero hablar acompañado de un Gin Tonic, un Ron Limón o un buen vino, a salir de fiesta toda la noche. Aunque está claro que de vez en cuando apetece, pero no todos los fines de semana.
Soy así ahora, y estoy bien.
Esta noche he quedado con amigos de aquí, cuando salgan del cine. Han ido a ver Rompe Ralph. A mí no me gusta así que no he ido con ellos. Yo quiero ver "Los Miserables", la película, pero como nadie quería venir conmigo...esperaré a que alguien se decida creo. A las malas, iré yo.
El proyecto de la clínica va avanzando y estar al frente de algunas decisiones me da una perspectiva algo más clara de a lo que me voy a dedicar en el futuro. Es algo pesado a veces, pero ver el trabajo hecho y que va avanzando es muy gratificante. Además, el hecho de que sea de mi abuela y de que en él vayan a trabajar mi madre y mi tío lo hace mucho más especial, se hace con más cariño.
En fin, voy a dejarlo por ahora, puede que vuelva otro día o más tarde, cuando vuelva de mi cita con mis amigos.
Ciao
Es Navidad ya, 25 de Diciembre. Estoy en el sofá de casa, con mi madre al lado leyendo unas cosas de acupuntura. El sábado se va a Valencia al curso otra vez y me estoy pensando irme con ella para conducir y también para estudiar el tiempo que ella esté en el curso. Es durante todo el día, así que si me voy será para volver sobre las 9 de la noche. No se lo que haré.
Ayer hablé con mi novio, como vivimos a casi 3000 kilómetros de distancia no nos vemos en Navidad, así que nuestra única forma de comunicarnos es vía teléfono. Ayer hablamos sobre las 3 de la madrugada, cuando acabó toda la cena. Yo estaba durmiendo y mi madre cogió el teléfono y contestó, estuvo un rato hablando con él y luego me lo pasó. Hablamos de cosas tontas, lo de siempre. Preguntas normales sobre cosas normales. Tengo ganas de verle la verdad, aunque aún puedo controlar las ganas. De todas formas, por la noche cuando estoy a punto de dormirme, pienso en él, en nuestra relación y me pongo a llorar. Es tonto porque todo va bien, no hay ningún problema de convivencia y cuando estamos juntos, en fin, todo va bien. Pero cuando le escribo estos días no me contesta, y sí que lee lo que escribo. Así que me enfado, en cierto modo. Porque yo sí contesto a lo que me escribe. No se el ritmo que lleva estos días, aunque seguro que es mucho más movido que el mío. Aún así sufro, por algo tan simple como pensar que yo estoy más pendiente de él que él de mí.
Sin embargo, por lo que le conozco y lo que hemos hablado, él es así. No está pendiente de muchas cosas, y no lo hace aposta, él es así. Es algo que no me gusta mucho de él, pero me sienta bien que sea así, porque así crezco un poco más cada día, porque tengo que aprender que no solo existe esta relación en mi vida ni es mi única meta, sino que existen muchas otras, como ser una buena arquitecto, acabar bien la carrera y trabajar todo lo que pueda en ello, salir con mis amigos, relacionarme más con la gente de la universidad, porque este cuatrimestre he estado bastante más aislada, sobretodo a raíz de lo que pasó con mi antigua compañera de piso, algo que al final no salió bien y fue un palo bastante grande. En parte por mi culpa.
En fin, son cosas que se aprenden poco a poco y a base de palos. A estas alturas del año, una reflexiona sobre todo lo que ha pasado durante él y me doy cuenta de que soy una persona muy distinta ahora, un año después, y de que la gente que está a mi alrededor ha cambiado, me refiero a que son personas distintas, no son las mismas con las que empecé. Son más adultas, tanto en edad como en mentalidad.
Mi prima dice que soy una vieja y aburrida. Es posible que sea así, pero lo que yo veo es que tengo otras prioridades, otras necesidades, otras formas de relacionarme con la gente; prefiero una buena cena o un café con alguien con quien quiero hablar acompañado de un Gin Tonic, un Ron Limón o un buen vino, a salir de fiesta toda la noche. Aunque está claro que de vez en cuando apetece, pero no todos los fines de semana.
Soy así ahora, y estoy bien.
Esta noche he quedado con amigos de aquí, cuando salgan del cine. Han ido a ver Rompe Ralph. A mí no me gusta así que no he ido con ellos. Yo quiero ver "Los Miserables", la película, pero como nadie quería venir conmigo...esperaré a que alguien se decida creo. A las malas, iré yo.
El proyecto de la clínica va avanzando y estar al frente de algunas decisiones me da una perspectiva algo más clara de a lo que me voy a dedicar en el futuro. Es algo pesado a veces, pero ver el trabajo hecho y que va avanzando es muy gratificante. Además, el hecho de que sea de mi abuela y de que en él vayan a trabajar mi madre y mi tío lo hace mucho más especial, se hace con más cariño.
En fin, voy a dejarlo por ahora, puede que vuelva otro día o más tarde, cuando vuelva de mi cita con mis amigos.
Ciao
martes, 18 de diciembre de 2012
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